viernes, 5 de septiembre de 2008

a manera de título me gustaría poner algo así como se necesita un detective salvaje para encontrar a Isteri pero no me decidí prefiero decir que

vivo de prisa porque ejerzo la violencia de piernas el torbellino o huracán de alientos cortos que forman una gran bocanada que aún está aspirando su aire que bien podría ser dióxido de carbono porque a estas alturas nadie duda que el tiempo se cuela entre los labios y el espacio que dejan los pasos
¿qué pasos?
al respecto tengo una pregunta de esas que valdría la pena no responder porque hacerlo evindenciaría el ocio que carcome mis soledades aunque pensándolo bien igual mis compañías
¿quién mató a Isteri?

9 comentarios:

Ricardo Arce dijo...

La pregunta debiese ser: ¿Quién mató la noche de Isteri?

Ante eso una sonrisa socarrona y una mano maculada.


Cada quién muere de propia mano (sobre todo los escritores chafitas).

Anónimo dijo...

Ni madres, Isteri sigue y seguirá vivo en nuestras corazones..., como la navidad, o más o menos.

Profana dijo...

Te iré a buscar al norte pues?

Me uno al comentario de Lear, usté es como el Infante, no muere si vive en nuestros corazones...

Besos Guarache

Profana dijo...

Profana, calle de Tamaulipas, la Condesa, 8 de septiembre de 2008. Yo lo conocí cuando tenía 24 años. En realidad, las probabilidades de conocernos eran pocas, no nos movíamos en ningún ambiente parecido, pero las maravillas de la tecnología, más específicamente el internet hicieron que sucediera. Yo tenía un blog y el también. Alguna vez se quedó de ver con otros bloggeros a los que leía y yo fui invitada. Estaba un canoso al que le decían Lear, otra muchacha joven a la que se referían como DF. También, desde luego, estaba el organizador. Llevaba una boina, era flaco como una aguja y tenía un carisma impresionante. La primera vez pensé que o era un genio o sólo un loco cualquiera. Planeaba con Lear un asalto a Bellas Artes o algo así y después se pusieron a hablar de escritores y poesía. Después él me pidió que lo acompañara con un ron y acepté.

Ya luego lo vi más veces. Todos los jueves nos reuníamos en alguna cantina y hablábamos de todo y de nada. Su presencia siempre causaba alegría, era de ésos a los que todo mundo quería escuchar, ya fuera para discutir de política o de libro o hasta para nomás contar un chiste. Siempre andaba bien acelerado, de un lado para otro, hasta las palabras las pronunciaba rápido. Supongo que todo esto era debido a su ritmo de vida y trabajo, ya no había más que hacerle. Aún así, siempre se daba tiempo para nosotros y para el tequila que religiosamente tomaba al final de las reuniones. También era como las olas, a veces no venía o no se acercaba tanto. Me prometió una pizza de un lugar cercano a mi trabajo donde las hacían muy buenas. Pero esa no es la respuesta a la pregunta.

Débora Hadaza dijo...

isteriquillo sarniento... estas muerto? eso si que me parte el corazòn... llorarè y llorarè porque nunca te vi, buaaaaaaaaaa

Citlalinushka dijo...

y bueno pues..¿qué hay detrás de la ventana?


Profana le ha regalado un lindísimo comentario.

beso de pintura acuarelable.

Eric Uribares dijo...

gracias a todos por sus comentarios, neta que no se por qué me han gustado mucho, tanto que (cosa que no hago a menudo) los estoy respondiendo.

Pero no MI ESTIMADA LENTEJA usté se voló la barda....en verdad que cuando escribí el post estaba pensando en ¿qué hay detrás de la ventana?

jejeje, NO MAMES¡¡¡ que buen pedo que lo hayas identificado...Salve Bolaño¡¡¡

Citlalinushka dijo...

jua jua, esque estamos embolañados.

beso.

Cynthia Ramírez dijo...

Isteri non é morto

"toons are supposed to make people laugh"